Hoy es protagonista.....

la ASOCIACIÓN "PANAL" de NALDA

El 19 de agosto de 1995, la imagen de la Patrona de Nalda, la Virgen de Villavieja, una talla sedente de madera policromada de transición entre el románico y el gótico del siglo XIV, fue robada de la ermita de idéntico nombre. El pueblo de Nalda se movilizó uniendo su fuerza en un sinfín de actos y protestas que no sólo consiguieron llamar la atención de todos los medios de comunicación a nivel nacional, sino que tuvieron como feliz resultado la recuperación de dicha talla unos 2 meses después.

Este suceso, lo podríamos señalar como el "nacimiento " de la Asociación de Protección y Promoción del Patrimonio de Nalda (PANAL), pues a raíz del robo y de la recuperación de esta talla, un grupo bastante numeroso de vecinas y (algunos) vecinos de Nalda empiezan a trabajar organizadamente a favor del patrimonio naldense que, como en tantos otros pueblos, se encontraba en un estado de deterioro y abandono significativos.

PANAL es, ciertamente, una asociación de patrimonio local, pero, al mismo tiempo, su filosofía de trabajo va mucho más allá. En primer lugar, nuestra definición de patrimonio es mucho más amplia de la que normalmente se le suele atribuir. Patrimonio ciertamente es arte, sacro y secular, arquitectura, monumentos, historia, ... pero también es medio ambiente, costumbres, tradiciones, agricultura, desarrollo rural y sostenible, .... En resumen, todo lo que hace que un pueblo mantenga su propia identidad y se mantenga vivo, pues por mucho patrimonio que tengamos, no nos sirve cuando nuestros pueblos se quedan sin gente.

Desde muy pronto, PANAL establece un vínculo muy fuerte entre la protección y la promoción del patrimonio y una actuación de marcado carácter social y colectivo. Se coordina con todas las demás asociaciones y grupos del pueblo, también con el Ayuntamiento, y "provoca" en 1999 la creación de la Asociación de Empleo "El Colletero" que empieza a crear programas de empleo en los que personas de Nalda ofrecen servicios que, a su vez, repercuten directamente en favor del pueblo (ayuda a domicilio, ludotecas, apoyo escolar, gestión de las piscinas municipales, etc.). Al mismo tiempo, PANAL estrecha sus lazos más allá de su municipio, coordinándose con varios pueblos que también han sufrido el expolio de su patrimonio, integrándose en la Plataforma Rural, colaborando con instituciones como el CEIP, la Fundación Caja Rioja, etc. e incluso moviéndose en el contexto internacional (cooperación al desarrollo, programas europeos, campos de trabajo internacionales).

Nalda es, sin duda alguna, un pueblo vivo, lleno de iniciativas, con un fuerte movimiento social y participativo, y preocupado por su pasado, presente y futuro. Y ciertamente, PANAL algo ha contribuido que eso sea así, pues estamos convencidos que, solamente, a través de la participación social y el movimiento ciudadano podamos lograr que nuestro pueblo y nuestro entorno mejore, en el sentido más amplio de la palabra.

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